Muchas empresas industriales han comenzado a entender que la manufactura de productos y piezas para ser ensambladas, se viene transformando en una combinación de manufactura-servicio-estrategia. Los productos necesitan mas que nunca, valores intangibles y conexiones directas con el consumidor.
La Senia es un pueblo pequeño ubicado en la provincia de Tarragona cerca del Delta del Ebro, con unos seis mil habitantes y con una industria manufacturera centrada en fabricación de muebles, que tuvo gran prosperidad y crecimiento hasta que sucumbió a la crisis económica a la región. Desde entonces las empresas sobrevivientes, luchan por encontrar modelos y estrategias para entender las nuevas circunstancias del mercado y volver a generar crecimiento.
A mediados de Septiembre 2015, a través de Acció, El Consejo Comarcal del Montsiá y Montsiá Actiu con la colaboración de Cenfim, nos encargan diseñar una serie de sesiones de trabajo, que ayuden a los empresarios de la zona a entender y planear nuevos modelos y oportunidades de negocio para sus empresas.
Durante las sesiones de trabajo realizadas de octubre a febrero con la empresas de La Senia, tras el análisis de la evolución de su negocio en los últimos años y en muchos de los casos allí expuestos, una de las conclusiones importantes ha sido, que la mera manufactura de productos, no ofrece a estas empresas argumentos o ventajas competitivas suficientes para navegar las nuevas tendencias de consumo y los nuevos formatos de oferta, que las grandes empresas multinacionales del mundo del mueble y la decoración plantean a los consumidores actualmente.
La capacidad de diseño, distribución, exhibición y renovación de estilos es mínima, en un formato de producción que depende de más del proceso de producción que de la demanda del mercado. Nuevas tendencias en los estilos de vida como la customización, la movilidad y el consumo sostenible, terminan yendo en contra de productos que se concibieron en otro sistema de oferta-demanda y que hoy compiten con productos estratégicos y llenos de valor añadido.
El reto fue grande, sin embargo el talento de las empresas de la zona y su profundo conocimiento del negocio hicieron que surgieran propuestas de valor nuevas e interesantes, modelos de comercialización que optimizan recursos y formas nuevas de negociación que incluyen la empatía como herramienta y el diseño de servicios complementarios al producto en casi todos los casos.
Queremos agradecer a las empresas y empresarios de La Senia por participar en las sesiones de trabajo, por su energía e ideas. También a Cenfim por prestar sus instalaciones y ayudarnos con información y recursos y al Consejo Comarcal del Montsiá, por contar con nosotros para introducir estas nuevas herramientas, que esperamos contribuyan a la normalización del tejido empresarial de la zona.